El Centro de Derechos de los Trabajadores comenzó a representar al camionero Curtis Vance después de que asistiera a nuestra Clínica de Derechos de los Trabajadores durante su primer año en enero de 2015. Vance a menudo pasaba más de la mitad de su día "en servicio, no conduciendo", lo que en su mayoría no se pagaba bajo el esquema de pago a destajo. El Centro presentó su reclamación en Febrero de 2015.
Mientras tanto, la Legislatura promulgó AB 1513, que proporcionó un puerto seguro limitado a los empleadores que han pagado indebidamente a sus trabajadores bajo un esquema de pago a destajo. En diciembre de 2015, pocos días antes de que la nueva ley entrara en vigor, el Comisionado Laboral determinó que el esquema de pago a destajo de la empresa no compensaba al Sr. Vance por todas sus horas trabajadas y le otorgó $78,537.38 por salarios atrasados, primas por periodo de comida y otras sanciones.
El empresario recurrió la decisión del Comisionado de Trabajo y, citando la nueva ley, alegó en el juicio ante el Tribunal Superior de Sacramento que debía ser absuelto de toda responsabilidad. El tribunal estuvo de acuerdo, al considerar que el pago por parte del empleador de 4.762,52 dólares en un esfuerzo por utilizar la cláusula de salvaguardia le permitía eludir las sanciones incluso para aquellas reclamaciones específicamente excluidas de la nueva cláusula de salvaguardia. Aunque la disposición de puerto seguro lo exigía, la demandada, Quikrete, no presentó pruebas de haber pagado a todos los trabajadores a los que se había retenido indebidamente el salario a destajo. Apelamos la orden del tribunal de primera instancia argumentando que el empleador no cumplió con todas las disposiciones del puerto seguro e, incluso si lo hubiera hecho, el tribunal de primera instancia barrió indebidamente reclamaciones con el puerto seguro que estaban expresamente excluidas por la nueva ley.
El 18 de julio de 2018, con nuestro co-asesor de Leonard Carder, LLC, argumentamos el caso ante el Tribunal de Apelaciones del 3er Distrito. El tribunal concluyó que el tribunal de primera instancia se equivocó al conceder la defensa afirmativa basada en la disposición de puerto seguro porque Quikrete no había demostrado que había pagado a todos sus empleados según lo requerido por el estatuto y devolvió al tribunal de primera instancia para una nueva audiencia sobre esa cuestión y para reconsiderar todas las cuestiones incluidas en la apelación.
El Centro para los Derechos de los Trabajadores seguirá representando al Sr. Vance en el segundo juicio.